Al parecer a Merlo-Vega la decena le sienta bien, “10 categorías de las tecnologías web”, “10 clases de aplicaciones de la web en las bibliotecas” y “10 claves de la web social”. Sobre este este último artículo será sobre el que desarrolle la reflexión..
Citando las palabras del autor "La web social ante todo es web", auque hayamos etiquetado su etapas de evolución como web 1.0 o tradicional antes, ahora web 2.0 y llegando… la web 3.0, es conocido por el común de las personas como Web. Pero para aquellos que gustamos por afición o por profesión, o ambas, de la tecnología y la información, como es mi caso, hemos aprendido del significado que estas etiquetas representan, lo cual permite que configuremos un nuevo esquema de uso de estas herramientas y servicios en este entorno. Me pregunto ¿Sin embargo aquellos otros usuarios de la tecnología y la web les afectara no saber su significado? Pues creo que si, en este entorno de la web 2.0 donde todo cambia velozmente, tecnologías, necesidades, comportamientos, se hace necesario saber dónde estamos, pues lo que no se conoce bien para que esta allí, no se puede explotar bien.
Definitivamente la cooperación es lo que más caracteriza esta web 2.0. Con esta metodología somos nosotros los que dinamizamos los contenidos que se publican en la web y del que todos podemos participar y disfrutar.
Aunque las herramientas de la web 2.0 se distinguen por su sencillez y facilidad de uso (considerando mínimamente que la persona tiene conocimientos básicos de informática), creo que su éxito también radica en la interoperabilidad estas tecnologías, donde se integran múltiples aplicaciones o servicios web, facilitando su administración por parte del usuario, por poner un ejemplo. Ahora tomando la experiencia del curso, hemos tenido que inscribirnos en varias de estos servicios, les agregamos componentes para dinamizarlo e interconectarlo, algunos llegamos a tener muchos servicios enlazados, otros aun no nos atrevimos a tanto, pero se evidencio una confusión por parte de muchos de nosotros de no saber qué hacer con tantas opciones que nos ofrecen. Puede ser una realidad, tener varios blogs, conectados a Twiiter, a Facebook, con RSS integrado al blog o siguiendo a través de un Reader, un contador web, y otros tantos componentes adicionales que podemos conectar. Ahora cómo podemos hacer para que de una manera equilibrada y beneficiosa podamos explotar la posibilidad de interoperabilidad de estos sistemas, sin desbordarnos. Tenemos todo a nuestra disposición, por ello creo que el usuario debe ser selectivo a fin aprovechar los beneficios de estos servicios y sobre todo adquirir el conocimiento de la herramienta. Como reza el dicho que podemos trasladar a este entorno es velar por "la calidad antes que cantidad” y sobre todo “saber para qué y para que no podemos usar tal o cual herramienta o servicio web”.
Con respecto al punto de "Desinterés como base", puede darse varias interpretaciones. La primera, yo completaria la frase de Merlo-Vega para que pudiera leerse así: "Desinterés comercial como base". Afirmo esto porque son las comunidades las que han creado y fortalecido todo el movimiento de la web 2.0, creando y promoviendo el uso de tecnologías “gratuitas”, al menos no me han cobrado para suscribirme a algún servicio, al menos no directamente.
Un ejemplo, cuando Mark Zuckerberg creó Facebook, lo animo el deseo de usar la web para compartir gustos y aficiones con sus amigos de la universidad, realmente no pensó en el gigante que FB llegaría a convertirse en la actualidad (bueno ahora tiene el derecho de negociar con su creación), pero igual todos lo usamos gratuitamente. Diremos que fue desinteresado cuando lo creo.
Otro enfoque que daría a la frase "Desinterés como base", expresado por Merlo-Vega, es querer imprimirle con ese termino el espíritu de la web 2.0, la participación, el compartir, la colaboración, entre aquellos que tal vez solo se conocen por foto, nickname, o por lo que escriben, como lo estamos experimentando en este curso; y cuando terminemos cuantos continuaremos alimentando nuestro espacio, o creando otros solo por el gusto de querer hacerlo. Perteneceremos entonces al grupo de los desinteresados.
Pero de todo existe en “la viña del señor”, también están los interesados que buscan una retribución económica por su contribución y no está mal, pero como bien señala Merlo-Vega este no afecta al usuario general que si es desinteresado y al cual la web 2.0.le debe también su éxito.
Entradas
Mendeley, es un gestor bibliográfico gratuito y libre que nos puede ayudar a organizar nuestra investigación, y es asimismo una red social académica donde podemos colaborar con otros en línea, crear grupos y explorar sobre investigaciones recientes. Básicamente te permite tener tu propio muro para enviar mensajes y recibir actualizaciones, Organizar tu biblioteca personal, Crear o juntarte a grupos, buscar documentos por categorías o libremente, también puedes localizar personas por nombre o por temas de interés. La gran utilidad práctica es que todos los documentos presentan el resumen y ocho diferentes estilos para citar el documento, además que lo puede compartir directamente a través de Facebook y Twitter. Se puede descargar fácilmente una versión para escritorio que se sincroniza con la versión web. Es una herramienta que estoy empezando a conocer pero la creo desde ya estupenda por la potencialidad social que ofrece.
